Un automovilista perdió la vida al chocar con un caballo el sábado por la noche, sobre la ruta nacional 51, en La Silleta.
Claudio Aguero conducía un automóvil Renault Mégane gris y llevaba como acompañantes a su pareja y dos niños de 9 y 11 años.
Pasadas las 21, la familia transitaba por la ruta nacional 51 y al llegar al kilómetro 10 y medio, de forma imprevista un caballo se cruzó por el camino. El conductor no tuvo tiempo de esquivarlo y chocó de lleno con el animal, que salió despedido y cayó sobre el capot de otro auto, un VW Gol, conducido por una mujer de 35 años. El caballo quedó tendido sobre la ruta y fue embestido por otro vehículo, un Peugeot 408. Todos los automóviles involucrados se desplazaban en sentido oeste-este.
Finalmente, al Peugeot lo chocó un cuarto vehículo, un Ford K que transitaba en sentido contrario. Todos los protagonistas resultaron lesionados con politraumatismos y fueron trasladados al centro asistencial de La Silleta y luego derivados al hospital de Campo Quijano.
A raíz del impacto Aguero sufrió gravísimas heridas en la cabeza. El médico legista que examinó su cuerpo diagnosticó que falleció por un traumatismo grave de cráneo, múltiple fractura fronto-temporal izquierda y fractura de nariz.
La Fiscalía Penal de Rosario de Lerma dispuso que el Cuerpo de Investigaciones Fiscales le practique análisis a la víctima fatal, identifique al propietario del caballo y les extraiga muestras de sangre a los conductores involucrados.
La Policía informó que tras arribar a la escena del accidente hallaron al dueño del caballo, un joven de 21 años, quien vive en la zona.
"Fue llevado a la comisaría cercana porque aparentemente estaba alcoholizado. Se lo identificó de forma simple y se lo trasladó al hospital para que le practiquen el análisis de sangre", informaron fuentes policiales.
La problemática de los animales sueltos es un mal endémico. El 3 por ciento de las muertes en accidentes de tránsito son por esta causa.
Fuente: El Tribuno
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