lunes, 27 de enero de 2014

Siguen las derivaciones de la tragedia de Quijano

“Lo acusan a mi hijo que no puede defenderse” Lo dijo el padre de uno de los jóvenes que iba en el auto que causó la muerte a tres personas. Por el impacto el chico está muy grave.

A nueve días de la tragedia del camping de Campo Quijano siguen las derivaciones. Este accidente ocurrió cuando un auto fuera de control se llevó todo por delante y dejó tres muertos. El padre de Mario Alejandro Liendro (26 años), quien viajaba en el vehículo que provocó el incidente, dijo que ahora tratan de culparlo a su hijo porque no puede defenderse, ya que el joven está internado en terapia intensiva y muy grave, producto de los golpes recibidos por el impacto.

El domingo 19, por la tarde, Mario Liendro viajaba en el asiento de atrás del auto conducido por Jorge Barrientos. Mario Omar Flores es el padre del joven y ayer se comunicó con El Tribuno para aclarar algunas cosas. “Quiero desmentir al abogado de Barrientos, quien llegó a decir que mi hijo apretó el acelerador del auto, lo que provocó que Barrientos realizara una mala maniobra y se produjera el accidente”, señaló el hombre.

Muy dolido, Flores dijo: “Ahora hablan y lo culpan a mi hijo porque no puede defenderse”. Es que producto del terrible impacto, el chico está con muerte cerebral. El joven ingresó en el hospital San Bernardo sin conocimiento. Lo operaron por un traumatismo en la parte izquierda del cráneo, con pérdida de ojo.

El hombre contó que su hijo Mario salió despedido del auto esa tarde, por lo que lo encontraron más allá de la trágica escena. “El ingresó al hospital como NN y nosotros recién lo encontramos el lunes por la noche. Ahora mi hijo está en terapia intensiva y tiene muerte cerebral. Mañana (por hoy) verán su evolución y, si no es favorable, lo van a desconectar”, señaló. Esto haría que Mario se convierta en la cuarta víctima de este terrible hecho.

También señaló que Arnaldo Estrada, abogado de Barrientos, dijo que los jóvenes que viajaban en el auto lo fueron a buscar al acusado para ir a dar una vuelta. Sin embargo, Flores contó que fue todo lo contrario. “Barrientos estaba de vacaciones y fue a buscar a los chicos que viven en Rosario de Lerma”, afirmó.

“Barrientos andaba con Aguirre (otra persona que viajaba en el auto) y fueron a buscar a los otros chicos. Luego fueron al dique Las Lomitas. Como estaban tomando, fueron sacados de allí por la Policía, que tendría que haberlos detenido. Luego fueron a Río Blanco y luego fue la tragedia”, dijo Flores, relatando el itinerario realizado por el Fiat Uno.

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