Destacaron que en algunos establecimientos los chicos se pelean por los bancos. Piden más aulas y mejoras de fondo. Los padres gastaron mucho más que en 2011 en la compra de útiles. Por eso, optan por reciclar uniformes y mochilas.
El Tribuno realizó una encuesta en distintas ciudades de la provincia para saber cómo percibieron los padres esta vuelta a clases, en qué estado encontraron las escuelas; cuánto gastaron en la compra de útiles y uniformes; si sus hijos realizan actividades extracurriculares y cuánto les insumen en dinero. La mayoría señaló que encontraron los edificios escolares en el mismo estado que el año pasado, aunque con algunas obras de refacción y mantenimiento.
También hicieron hincapié en la necesidad de más aulas, mejoras en baños, recambio de pupitres y presencia de ventiladores en los grados, entre otros.
Con respecto a la compra de útiles y uniformes, la mayoría coincidió en que debieron gastar entre $200 y $400 para que sus hijos cuenten con todo lo necesario para el nuevo año. Destacaron, además, que el gasto fue mayor que el año pasado.
Muchos señalaron que compraron sólo lo indispensable y que reciclar elementos y uniformes de años anteriores o de los hermanos mayores es ya una constante.
En cuanto al ámbito extracurricular, en ciudades como Metán y Orán, la mayoría envía a sus hijos a realizar actividades fuera del ámbito escolar, situación que se revierte en algunas localidades del Valle de Lerma, como El Carril o Campo Quijano, donde los padres priorizan pagar las clases de apoyo escolar.
En el Valle de Lerma
El costo que implica mandar a los chicos a la escuela en el Valle de Lerma obliga a no pocos padres a reciclar útiles viejos, en su afán de que el presupuesto les alcance para educar a sus hijos. Mientras algunos pueden adquirir lo básico, otros esperan la ayuda del Estado.
En los sondeos realizados en Cerrillos, El Carril, La Merced, Rosario de Lerma y Campo Quijano la mayoría de los padres consultados expresaron que aún no terminan de comprar todos los elementos, por lo costoso que resulta adquirir libros o útiles escolares, a diferencia de años anteriores.
No obstante, de la encuesta se desprende un dato alentador: se observó un aumento en la cantidad de chicos de la región que este año acuden a la universidad o a institutos terciarios. La mayoría de los encuestados tiene más de dos chicos en el período escolar, principalmente en la primaria.
Casi todos coincidieron en que es muy costoso enviar a sus hijos a estudiar y que apenas les alcanza para adquirir lo básico en cuanto a útiles. Otros encuestados afirmaron que tienen muchas necesidades básicas insatisfechas y que, por lo tanto, esperan la ayuda del Estado.
En El Carril, La Merced, Rosario de Lerma y Campo Quijano una escasa minoría opta por enviar a sus chicos a realizar actividades extracurriculares. “Sólo para que sepan un poco más”, detallan los padres que pueden afrontar estos gastos.
Otras actividades
De esa minoría, casi todos los encuestados envían a sus hijos a clases de apoyo. Para ellos los gastos superan los $200 mensuales. El resto hace participar a sus hijos en actividades curriculares, especialmente las relacionadas con el deporte, inglés y computación.
En el caso particular de Cerrillos, los montos son accesibles y en algunos casos gratuitos, favorecidos por el funcionamiento de varias fundaciones que ofrecen talleres de capacitación. En instituciones privadas los servicios van de los $100 a los $200 y en ONG menos de $100. En La Merced el 70% de las actividades extracurriculares están relacionadas con los deportes
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